Medición de la viscosidad de quesos fundidos en proceso

Las materias primas lecheras son de composiciones variables y sus influencias sobre el proceso de fabricación deben ser corregidas. Para fabricar queso fundido, las operaciones de cocina y de mezcla (velocidad, duración…) tienen que ser muy precisas para alcanzar la textura final deseada.

Cuando se añaden las sales de fusión a los ingredientes, la consistencia del queso Viscosidad queso fundidofundido puede cambiar y volverse demasiada gruesa o demasía fluida; al final, la calidad del producto está en desacuerdo con las expectativas del cliente. Frecuentes paros de producción pueden ser consecuencia de estas variaciones de consistencia.

El control del proceso de fabricación y de maturación del queso fundido puede ser realizado de manera fácil gracias a la instalación de un viscosímetro de proceso MIVI con su interfaz electrónica. El MIVI permite la determinación de características físicas como la consistencia directamente correlacionada con la viscosidad.

En esta aplicación, el viscosímetro de proceso MIVI está diseñado con un montaje sanitario de tipo 3A, evitando la proliferación de bacterias. El sensor ofrece un sistema de limpieza CIP (Cleaning In Place) en el proceso, sin necesidad de desinstalarlo.

La instalación de un viscosímetro de proceso Sofraser MIVI permite alcanzar los ajustamientos óptimos de varios parámetros, garantizando la calidad del producto fabricado y manteniendo un alto nivel de satisfacción cliente (minimizando las reclamaciones).

Gracias a las correcciones de variación de materia y a las economías realizadas, el uso de un viscosímetro MIVI en este tipo de aplicaciones procura usualmente un retorno sobre inversión por debajo de los 6 meses.